CRAFT-MALZ, nuestro mix "clean label" especial con malta de cebada, espelta, centeno y trigo y redondeado con aceite de lúpulo, es sin dudarlo mi producto preferido.
Además del aroma y sabor característicos que aporta, lo que más me gusta de CRAFT-MALZ es su gran versatilidad, ya que se puede usar del 5% al 15% sobre la harina en prácticamente todo tipo de elaborados —tanto de panadería como de bollería, e incluso de pastelería—, facilitando así la creatividad artesanal de cada profesional.
En panadería y bollería, se puede emplear del 0,5% al 1,2% para aportar aroma y brillo a la corteza sin modificar el color de los elaborados. Con dosis más altas, conseguimos que los elaborados tengan algo más de sabor y color y que la corteza sea más crujiente gracias a los azúcares de las diferentes maltas.
Al 15% en pan, permite prescindir de mejorantes y conseguimos un color de la miga bastante oscuro y un toque dulzón que servirá de base para añadir ingredientes dulces, salados e incluso picantes, por ejemplo, frutos secos, cacao, tomate, pimiento, chile, higos…
En pastelería, podemos añadir CRAFT-MALZ para elaborar un crumble malteado o un bizcocho con un interesante toque de cerveza. ¡Hay tantas posibilidades como seamos capaces de imaginar!
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